IRRESPETUOSA MUJER CON MUCHOS…PANTALONES

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Yuriria Iturbe, Magaly Deandar, Armando Zertuche, Marco Antonio Gallegos y Humberto Prieto apenas se habían acomodado en sus sillas, cuando desde el fondo del Salón se escuchó un grito que ordenaba con muchos pantalones ́ bajen sus cámaras ́.
La instrucción venía de una mujer. La daba cuando estaba a punto de comenzar la conferencia de prensa convocada, vía la vocera oficial de Morena, Chantal Martínez.
No fue una petición sino una auténtica orden.
No hubo tiempo de ponerle mayor atención a ese desplante , porque de inmediato los morenistas señalaron que estaban ahí para tratar lo relacionado con el tema de la candidatura de Carlos Makito Peña Ortíz a presidente municipal de Reynosa.
De inmediato comenzaron los cuestionamientos.
Todo fluía con civilidad y varios reporteros aprovechamos la oportunidad de cuestionar sobre el Caso Makito, que tiene en vilo a los Morenistas.
Mary Jaramillo, esa de la Trinchera Vietnamita, acababa de hacer su cuestionamiento, para que la contestara cualquiera de los 5 presentes, cuando, oootra vez desde el fondo, la voz de la misma mujer ordenó: ́es la última pregunta ́.
Ahí ardió una troya. Las voces de muchos reporteros se escucharon decir, ‘esa quien es’, refiriéndose a la de los grandes tanates, que dispuso que era la última y nos vamos.
La de la Trinchera Vietnamita , Mary Jaramillo, dijo, que en calidad de que esa persona decidía acabar de tajo con el encuentro de los morenistas con la prensa. Dejó bien claro que la responsable de la conducción de ese ejercicio de comunicación, le correspondía a Chantal Martínez.
Hubo una pregunta más y entonces sí, como debía ser, la titular de la oficina de prensa dió por concluida la conferencia.
No quise dejar pasar el momento y pregunté quién había sido la fémina de la cual habíamos recibido irrespetuoso trato. Me la señalaron y le tomé dos fotos.
No lo hubiera hecho, porque ella se me dejó venir, pero primero me solicitó que öra si le tomara la gráfica ́ y posó para la cámara. Aproveche su petición ý ‘click’, que la captó.
Ya fuera de si me comenzó a señalar que por qué le había tomado la foto sin su consentimiento.
´Porque usted participó en la conferencia´, fue mi respuesta.
´Yo no soy funcionario´, reviró.
Entonces, si no es funcionaria, por qué intervino para terminar con la conferencia, le inquirí.
«Porque es mi trabajo y así me lo ordenaron’’, atajó.
Ahí si ya no entendí. Primero dijo que no era y después que sí era.
Como sentí que me podía ‘enganchar’ en una discusión sin sentido le dije: usted es una dama y yo un caballero. Ahí le dejamos.
Los audios y videos no mienten.
De que hay mujeres irrespetuosas, las hay.